Con C de emprender es un proyecto y un concepto que nacen desde lo más profundo de mis entrañas, de un ejercicio de reflexión constante, sincero y desde el encuentro conmigo mismo basado en la experiencia propia.
Ahora, casi 20 años después de empezar, siento la necesidad de contarlo para, en la medida de lo posible, conectar con personas que se encuentren en este proceso, o bien por que han pasado por él, bien por que están inmersas en él o por que lo están empezando.
Este es mi proceso, mi historia, mi experiencia, mi vida. Una historia que mezcla componentes emocionales, claves para emprender, con otros más técnicos.
Y si todavía tienes dudas por qué Emprender debiera empezar por C, aquí te dejo algunos conceptos que personalmente valoro como claves del proceso de emprender, y por lo que es necesario pasar y valorar en algún momento del mismo.
Son 49 puntos, precedidos por uno que es el que siempre te va a acompañar y sin el que no es posible crecer: EL CAOS, como origen de todo proceso de crecimiento
- Comenzar, porque el inicio es la mitad del todo
- Conocimiento de mercado y entorno para desarrollar una estrategia adecuada
- Comprensión a la idiosincrasia de tu nicho objetivo
- Compón dos escenarios: el mejor y el más pesimista
- Creatividad en producto, en servicio, en la forma de prestarlo y, cómo no, en estrategia
- Calma. Paciencia
- Control de costes
- Corazón y pasión para poner el alma en todo lo que haces
- Capacidad para sobreponerse a las situaciones adversas: resilencia
- Conexión entre todas las áreas de tu vida: ser equilibrado
- Curiosidad
- Control de tus palabras
- Calidad de vida: ¿Por qué desperdiciar la vida ganándose la vida?
- Crecimiento personal vs profesional
- Confianza como elemento fundamental a generar en ti y en tus interlocutores
- Conocimiento y control de ego
- Celebrar, celebrar y celebrar
- Condenar el no de aquellos que te digan que no lo puedes conseguir
- Capacidad de vivir en la incertidumbre
- Conciencia de la posibilidad de perderlo todo
- Coraje para asumir riesgos y afrontar situaciones
- Capacidad organizativa, directiva y de delegación
- Cultura de inversión
- Cooperación simbiótica y exponencial, yo gano si tu ganas y juntos hacemos ganar a terceros
- Criterio para diferenciar los errores por hacer algo mal vs los errores por dejar de hacer algo
- Consecuente con las consecuencias
- Capacidad de respuesta al compromiso adquirido.
- Cuantifica tu trabajo y ponle el precio adecuado, solo trabajarás desde el amor
- Cuidar a tu equipo colaborador: trabajadores y, sobre todo, proveedores
- Camaleón para adaptar la estrategia a las situaciones internas y del entorno – mercado
- Consolidar cada paso del camino para conseguir un crecimiento sólido y sostenido
- Criba lo que te llega para no aceptar todos los proyectos
- Conviértete en la marca: Haz Branding
- Conciencia del no éxito
- Colabora / contrata gente para que trabaje en tu negocio, mientras tu trabajas en su desarrollo
- Constancia para superar los peores momentos y mantenerse firme en el objetivo final
- Compromiso contigo mismo, proveedores, clientes … y con el resultado
- Concreto y conciso para no perder el tiempo ni hacerlo perder a nadie
- Crece con tus objetivos. Pasa de los Smart a los Smirt
- Controla el tiempo en general y a cada proyecto
- Construye tu huerta y no compres fruta, planta tus árboles
- Claridad y ecuanimidad para la toma de decisiones de manera ágil y eficaz
- Coherencia con la imagen, actitud, comunicación, valores y decisiones
- Crear casualidades
- Crecimiento permanente en formación
- Camina recto
- Crosselling: Siempre que sea posible practícalo
- Creer para ver, no se trata de ver para creer
- Concretador como figura con la que “suplantar” al emprendedor